Miriam tiene esa energía firme y comprometida que se nota nada más verla en escena. Se ha formado con dedicación en distintos ámbitos de la interpretación, lo que le ha permitido explorar desde los textos clásicos hasta los universos más contemporáneos, pasando por el teatro infantil, el musical o el trabajo frente a cámara.

Cada paso de su recorrido habla de constancia: desde su paso por la Escuela Superior de Arte Dramático de Málaga, su trabajo en danza y canto, hasta su implicación en proyectos teatrales de géneros muy diversos, donde ha demostrado una versatilidad que no se aprende, se vive.

En lo audiovisual, Miriam ha sabido adaptarse con soltura al lenguaje del cine, rodando cortos donde ha dejado huella, sumándose a proyectos publicitarios o prestando su voz con naturalidad. Tiene una presencia que funciona en distintos formatos, porque sabe escuchar, construir, entregarse.

Con ella todo fluye: se nota que disfruta del trabajo, que le importa el equipo, que respira arte con los pies en la tierra y la mirada curiosa. Miriam no solo interpreta, entiende lo que implica contar historias, y ahí está su gran fortaleza.